¿Les gusta el jazz? ¿Coltrane? ¿Casavettes y
ese estilo tan jazzero y fresco que tenía para el cine? Entonces con ciertas salvedades les propongo
que vean este film, súper independiente –
del que todavía ni se como di con el …ahh si ya recuerdo, un catalogo viejo del fest de Mardel
plata-
En General el Mumblecore no me agrada, se que
podría tildarse como el equivalente a una “Jam session” cinemática y creo que
lo considero relevante mas por ser el registro de un momento que una obra a
conciencia – aunque también la conciencia de la obra se la puede encontrar
después- Por ejemplo muchos tildan a Richard Linklater de Mumblecore pero no,
se nota que hay un guión (por decir estructura) y que los diálogos son
naturales además de geniales solo porque
detrás de ellos hay una importante cantidad de ensayo… es
la clase de “Naturalismo” a la que
cuesta llegar... Pero en general el Mumblecore tiene guiones así como
“bocetados” o incluso carecen de estructura y esta se las provee el montaje del
film… entonces
la historia es como algo que se va desgranando y desdibujando hasta que se
diluye en el final.
Esto es Mumblecore, pero la música corre en su
auxilio y hace que sin ser “Once” (EL MUSICAL INDIE MAS ENCANTADOR DE LOS
ULTIMOS AÑOS) sea algo realmente interesante para ver. Admito que el trailer me
conquistó: presupuesto acotado, cine de gente jóven con ganas de hacer y el blanco y negro compra…
sobre todo cuando de Jazz se trata. (Además de historia de amor mixta, seudo triángulos
amorosos y si adivinaron: bancos de parques) Son de esos films que uno las mira
y dice “tengo que verla porque esto es lo que hay que apoyar ahora, la gente
que recién arranca” y sobre todo porque nunca sabés cuando podes encontrar tu
próximo “It's Impossible to Learn to Plow by Reading Books” .
y la
verdad se que no es “brillante” todo el
tiempo, tiene momentos que se instala el mmublecore y a mi me encantaron los
momentos en los que se instala la música y los cuadros de jazz y tap.
Ahora vamos a las “grandes teorías de la chica
cinéfila”:
Pero
no se que les pasa a los críticos por la
cabeza (dicho por alguien que no es critico, es antes que nada chica y cinéfila): no
podes – como estuve leyendo críticas por ahí- un tanto negativas, no podes criticar
a un realizador novel (Damien Chazelle)
de 26 años (si un año menos que yo) que tendría aproximadamente 24 años cuando
hizo este film y decirle “que se hace el Godard, los temas tienen el sonido un
poco raro, el ritmo se estanca” y toda una sarta de boludeces que le criticarías a un tipo que ya
lleva años en esto ¿NO? Porque sino
entonces, nadie podría hacer nada, y tendría que esperar a tener cuarenta y ser
un viejo frustrado para hacer cine. (Si estoy proyectando un poco, talvez
pero creo firmemente que mientras los que critican negativamente no piensan en
el esfuerzo de alguien que recién comienza y son unos resentidos de porquería
que solo dicen “afirmaciones polémicas” para hacerse notar. Y porque creo que experiencias así siempre
valen la pena (ahora si este chico hace 5 películas mas o 3 más y te parecen
mas de lo mismo y que no levanta la apuesta… bueno entonces enojate
todo lo que quieras, o la opción mas
saludable: reserva tu enojo para producciones millonarias carentes de sentido
que son un insulto al espectador y a la vida).
La
ciudad y la vida en Blanco y Negro se ven como cine de autor. A mi me encanta el blanco y negro tengo que
confesar –que habrán notado- colores hay por todas partes: como sociedad
creo que estamos saturados de colores demasiado brillantes y mega-saturados. ¿Por qué? Hubo una epoca en la que el B&N era la única
opción además del “entintado manual”, Luego el Blanco y Negro pasó de ser la única alternativa a ser una “Decisión estética”
–también unida al presupuesto- y ahora, que tenemos todas las posibilidades,
cada vez mas se ve un manejo del color mas desastroso (como si los colores
engamados y empastados con filtros soft a la usanza de películas vintage fuera
lo unico que se ve en estos dias… las pantallas cada vez con
mas definición y las pieles cada vez con mas photoshop) que esta bueno ver un poco la vida a través
de sus valores (de grises) para
variar. Este es uno de esos casos: las ciudades tienen magia cuando se las
registra en blanco y negro, como si de pronto la vida fuera toda Nouvelle
Vague. (y el jazz toda la onda)
Saludos amantes del séptimo arte:
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